16/10/07

Amantes y otros extraños

Las historias de amantes cuentan mucho más que su mera relación sentimental. En su vivencia del amor y del deseo, cada persona revela su verdadera identidad. El anhelo y el afecto, lejos de quedarse en una manera de unirnos al otro, muestran nítidos nuestros miedos, nuestra mezquindad y también, por su puesto, nuestra grandeza. Curiosamente es ahí, en el vínculo amoroso, en el espacio que requiere para existir de la presencia del ser amado, donde surge la clave de lo que somos como individuos. Y esa identidad propia que desata la cercanía del otro puede convertirlo en un extraño...

2 comentarios:

Morán dijo...

Ayer presencié su obra de teatro, y permítanme expresar mi opinión al respecto:
Si bien toda la obra me parecío estupenda, amena y entretenida, desearía resaltar la actuación del joven musculado de la escena segunda, cuyas dotes interpretativas se ponen al servicio del pusilánime personaje al que encarna y que ya fueran mostradas en forma de cartel en las marquesinas de Santander con airoso resultado.
Alabo , respeto e idolatro su trabajo, amigo anónimo, pues su nombre no me figura en el elenco principal; pero tenga por seguro, querido histrión, que ya mismo voy a bajarme su obra por el emule.
Un saludo cálido y distante

maria dijo...

La vi ayer, me encantó, merece la pena verla es muy entretenida, me divertí mucho, no como la última que vi (como abejas atrapadas en la miel), que mucho bombo y platillo y fue pésima.
Es un pena que en el arte también haya tanta tontería .